lunes, 31 de mayo de 2010

Un Día en el Proyecto OLPC Las Enramadas

“¡En cuanto me de la vuelta, van a correr con preguntas, así que para la próxima vez anótenlas por favor!” Con este comentario y una gran sonrisa culminó Kevin Benavides su capacitación de hoy en temas técnicos del proyecto One Laptop Per Child para los profesores de la escuela Las Enramadas en Esquipulas. Kevin es el joven a cargo del soporte internacional de OLPC en Nicaragua, con apenas 19 años ya tiene cuatro años programando en UNIX y trabajando “de la mano” con Nicholas Negroponte. Pero por el momento trabaja en realidad más de cerca con AMCHAM Nicaragua, a quien apoya en su programa de apadrinamiento para proyectos OLPC; específicamente a los padrinos como Generación Atlas (GA), que asumieron la responsabilidad de mejorar las condiciones de alguna escuela en el país.

Como parte de GA me correspondió entregar 81 convenios de colaboración que deberán firmar los padres de familia de todos los alumnos desde tercero hasta sexto grado. Jairo Cuaresma, un profesor de sexto grado, siempre atento y con excelente disposición toma el liderazgo al organizar al resto de profesores. El se compromete a empujar a los demás para conseguir las firmas y tenerlas lista la próxima semana. Y es que sin firmas y sin un previo entendimiento con los padres no hay manera de hacer que esto funcione. Las computadoras son entregadas a los estudiantes y la responsabilidad de cuidar, cargar la batería, limpiar y mantener en buen estado las portátiles es toda del alumno. Pero para ello debe contar con la aprobación y apoyo de su familia.

También entregamos una serie de afiches coloridos para colocar en las paredes de las aulas con el fin de sensibilizar a los estudiantes en cuanto al cuido de las máquinas. Esto forma parte de un programa de sensibilización y motivación más grande donde también contamos con el apoyo de nuestro buen amigo Raúl Obregón, gerente de M&R. Ya por último coordinamos la próxima reunión para recoger los convenios firmados y también aprovechar para otra capacitación en el uso de las portátiles.

Al terminar la reunión salimos del aula y mientras caminamos por los pasillos humildes de la escuela puedo notar la cara jovial y sonriente de Kevin, que sin pensarlo y casi automáticamente cataloga la escuelita dentro de la cantidad de escuelas que el conoce y regularmente visita. “Y me dice, están todavía crudos pero he visto peores...” Y nos vamos alejando de la escuela entre surcos de lodo suave, mientras una leve llovizna moja los techos oxidados de la escuela.

1 comentario:

  1. gracias por el post
    la idea es sacar la educación de nicaragua hacia adelante ya que la juventud tiene el poder del cambio

    excelente trabajo señores

    ResponderEliminar